Carrilleras de cerdo gallego

Descripción

Cerdo Gallego: Una Delicia Tradicional con un Toque Innovador

Descubre la Exquisita Carne de Cerdo Gallego, Alimentado con Castañas

Nuestra selección de Cerdo Gallego representa la fusión perfecta entre la tradición y la innovación. Esta carne, conocida por su jugosidad y sabor único, proviene de cerdos cuidadosamente seleccionados y criados en Galicia. Lo que realmente distingue a nuestra carne de cerdo es su alimentación especial: una dieta rica en castañas gallegas, un ingrediente que imparte un sabor dulzón y distintivo a la carne.

Calidad y Sabor que Recuerdan a los Tiempos de Antaño

La carne de nuestro Cerdo Gallego es apreciada por su textura veteada, resultado de una meticulosa selección genética enfocada en la infiltración óptima de grasa. Esta infiltración no solo mejora la jugosidad, sino que también enriquece el sabor, ofreciendo un perfil gustativo más intenso y una textura tierna que deleita al paladar.

Compromiso con el Bienestar Animal y la Sostenibilidad

El bienestar de nuestros cerdos es una prioridad. Se crían en un entorno tranquilo y libre de estrés, con todas las comodidades necesarias, lo que se refleja positivamente en la calidad de la carne. Además, al utilizar castañas gallegas en su alimentación, apoyamos la conservación de los tradicionales soutos (bosques de castaños) de Galicia, contribuyendo así a la sostenibilidad del entorno rural.

Una Alimentación Natural para un Sabor Auténtico

La dieta de castañas no solo es un homenaje a las tradiciones gallegas, sino que también es una elección saludable. Las castañas se recolectan localmente, se procesan cuidadosamente y se congelan para preservar sus propiedades nutricionales, asegurando que nuestros cerdos disfruten de una alimentación completamente natural durante todo el año.

El Cerdo Gallego: Una Elección Exquisita para los Paladares Exigentes

Nuestro Cerdo Gallego es más que una simple elección de carne; es una experiencia culinaria que transporta a los tiempos de antaño, manteniendo al mismo tiempo un compromiso firme con la calidad y la sostenibilidad. Ideal para una variedad de platos, desde asados tradicionales hasta innovadoras creaciones culinarias, esta carne promete satisfacer a los paladares más exigentes.

SUGERENCIA DE PREPARACIÓN

Carrilleras de cerdo en salsa de vino tinto

INGREDIENTES

• 8 carrilleras de cerdo
• 1 pimiento rojo
• 1 pimiento verde
• 2 dientes de ajo
• 1 cebolla
• 3 zanahorias
• 1 botella de vino tinto
• 250ml de caldo de carne
• 1 cucharadita de tomillo
• sal y pimienta
• aceite de oliva

ELABORACIÓN

Primero, con un cuchillo, eliminamos las grasas que puedan tener las carrilleras, y las salpimentamos por todas sus partes. Después, ponemos en una sartén amplia un chorrito de aceite. Lo calentamos a fuego fuerte. Cuando esté caliente, ponemos las carrilleras y las cocinamos durante alrededor de 2-3 minutos por cada lado. Cuando estén doradas las reservamos en un plato.

Después, en la misma sartén, a fuego medio, ponemos otro chorrete de aceite. Cuando esté caliente, añadimos el ajo, la zanahoria, el pimiento verde, el rojo y la cebolla, todo ello bien picado. Lo salpimentamos y dejamos que se cocine durante unos 12 minutos, removiendo de vez en cuando.

Pasado este tiempo, añadimos 1 vaso del vino tinto, el caldo de carne y la cucharadita de tomillo. Volvemos a remover para integrar todos los ingredientes. Corregimos de sal y de pimienta.

A continuación, añadimos las carrilleras y tapamos. Dejamos que se cocinen durante unas 3 horas manteniendo siempre el fuego medio. Removemos de vez en cuando para que se integren bien los sabores y añadimos más vino cuando la salsa se empiece a secar.

Pasado ese tiempo, retiramos a un plato las carrilleras y pasamos la salsa a un vaso batidor. La trituramos hasta que quede bien fina. Si queda demasiado densa -como una crema- añade un poco más de vino o de caldo. Si queda demasiado caldosa -como una sopa- deja que se cocine unos minutos más.

Para terminar, devolvemos la salsa a la sartén junto con las carrilleras y lo calentamos de nuevo a fuego medio. Corregimos de sal y de pimienta y dejamos que se impregnen bien en la salsa.

¡A disfrutar!